La receta de estas deliciosas recetas está sacada del libro de Isasaweis. Quedan unas galletas muy sabrosas, blanditas por dentro, y que aguantan tiernas varios días. En este caso las hice con harina de trigo normal y azucar blanco en lugar de integral, pero dejo los ingredientes de la receta original para crear una versión más sana.
Ingredientes
200 gramos de copos de avena
100 gramos de harina integral
100 gramos de azúcar moreno
100 ml de aceite de oliva suave
1 huevo
2 cucharadas de miel
1 cucharadita de levadura
1 ralladura de naranja y el zumo de una naranja
Rallamos una naranja con cuidado de no incorporar la parte blanca porque amarga y, posteriormente, la exprimimos. Reservamos.
En un bol echamos los ingredientes secos: los copos de avena, la harina, el azúcar, la levadura y la sal. Mezclamos bien.
Hacemos un hueco en el centro y agregamos los ingredientes líquidos: el huevo, el aceite de oliva, la naranja con su ralladura y la miel.
Removemos con una cucharada para integrar bien todos los ingredientes.
Cogemos porciones de la masa con las manos y hacemos pequeñas bolas. Las colocamos sobre una bandeja del horno cubierta con papel de hornear o papel albal y las aplastamos con los dedos.
Metemos al horno precalentado a 200 grados durante unos 10 minutos o hasta que se hayan tostado ligeramente.
Al sacarlas del horno las dejamos enfriar sobre una rejilla y ya estarían listas para comer.
Esta receta también admite variaciones, como por ejemplo estas galletas de zumo de mandarina y pepitas de chocolate.