Tarta fría de moka

Ingredientes

Para la base de galleta y cacao
25 gr de cacao en polvo

150gr de galletas maría

70gr de mantequilla

Para la mousse de café
200 ml de café expreso 
100 gr de azúcar
250 gr de queso mascarpone
400 ml de nata líquida para montar
9 láminas de gelatina
Para la decoración
100gr de chocolate

Comenzamos triturando las galletas María con ayuda de una picadora y, si no la tenemos, podemos meterla en una bolsa de plástico y machacarlas con un rodillo. Añadimos la mantequilla y el cacao en polvo.

Extendemos este polvo de galletas en la base de un molde redondo desmoldable. Reservamos.

Mientras tanto, ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.

Preparamos el café y, cuando aún esté caliente, disolvemos en él las hojas de gelatina, incorporándolas una a una.

Una vez templado, añadimos el queso y el azúcar y mezclamos bien.

Montamos la nata bien fría con ayuda de unas varillas.

Mezclamos la nata con la crema de café y la incorporamos con movimientos envolventes.

Metemos la tarta en el frigo (mejor si está durante toda la noche) hasta que la crema se haya solidificado.

Para la decoración de la tarta, fundimos el chocolate de cobertura y (con ayuda de una bolsa de plástico) hacemos unos dibujos en una hoja de papel de hornear. Una vez frío, lo rompemos en trozos y decoramos la tarta.

Ponemos la decoración de chocolate tanto en los laterales como en el centro de la tarta.

Fuente: Cuuking

Bizcocho de queso y chocolate blanco

 Ingredientes

3 huevos
120 gramos de chocolate blanco
120 gramos de queso fresco para untar
1 cucharadita de esencia de vainilla
Azúcar glas

Precalentamos el horno a 170º C y colocamos dentro una fuente con agua en la que quepa luego el molde del bizcocho. Separamos las claras de las yemas. 

Fundimos el chocolate blanco, al baño María o en el microondas poco a poco, teniendo cuidado de que no se nos queme.

Montamos las claras a punto de nieve fuerte a mano o con ayuda de un robot de cocina.

Mezclamos las yemas con el queso y la esencia de vainilla. Batimos bien para conseguir una mezcla esponjosa.

Incorporamos el chocolate fundido, una vez que se haya enfriado ligeramente, a la mezcla de yemas y queso.

Por último, incorporamos las claras a punto de nieve a la mezcla.

Vertemos la mezcla en un molde de silicona.

Metemos el bizcocho en el horno, dentro del recipiente con agua. Cocemos el bizcocho durante 30 minutos.

Apagamos el horno y dejamos el bizcocho dentro, con la puerta cerrada, 15 minutos más.

Una vez frío, lo desmoldamos y decoramos con azúcar glas.